Obras

En tránsito

En tránsito

La Presencia de Emutain

Cuando decidí que escribiría sobre Emutain tuve vértigo porque sabía que iba a revelar la historia de alguien que trasciende todos los límites. Hoy el libro está practicamente finalizado, pero queda todavía un tiempo para ser leído. Los episodios serán un aire puro y diferente que yo mismo necesito respirar. Serán como la brisa que humaniza la existencia hacia otros extremos insospechados.

"Creo que he logrado narrar desde el otro lado de la vida, desde la parte invisible. Él me enseño, poco a poco, a confrontar lo que se ve en lo oculto y bajarlo de la red suprema a las redes humanas que operan dentro de nuestra mentalidad".

"Cada una de sus manifestaciones las desglosé con la máxima meticulosidad. Siempre pretendí, con su aprobación y tal cómo acordamos, que todo lo que iba relatando estuviera en un contexto comprensible".

La cantidad de relatos y experiencias de Emutain sobre su tránsito no me permiten la premura de ponerlo sobre la mesa. Todavía no me siento  listo para entrar a la sala de máquinas que imprimen letras y más letras. No se trata de correcciones ni darle un punto de lectura adecuado, la forma amena o agradable para su lectura. Esas consideraciones son hoy argumentos pobres. De lo que se trata es de que como oyente y traductor que fuí, esté a la altura en fidelidad ante la historia que escuché, nutrirme de ella con mayúsculas y me atreva, por ello, a pasar del mutismo al pregón. Que me decida a armar un buen remolino por donde se engullan las fantasías y simplezas sobre nosotros mismos.
Emutain, un ser sorprendente e incluso parecido a o a , me contó desde su reino de la memoria la travesía que ocurre sobre una línea inacabable. Al contármela, me enteré del tránsito de todos y de mi mente saltaron miles de preguntas; después, me nacieron cientos de sensaciones, removí toneladas de ideas y finalmente volví al umbral, al principio, a una simple célula. Y vuelta a empezar.

"A través de su vibración, la de su misma presencia, entré al “tránsito”. Por dónde me llevó lo fuí reconstruyendo en palabras, aunque lo que me contó y explicó no tiene vocablo alguno. Desde ese lugar ni se emiten ni se escriben. Una palabra es un efecto de baja frecuencia y una letra: nada".

Prometo que trabajaré en esa "nada" para presentar EN TRÁNSITO como un libro donde leer "todo". Lo concluiré con su punto final y con decisión y sin temblarme el pulso, publicaré todo el gran repertorio que va más allá de cualquier anécdota. Lo haré, lo , en el instante correcto.